Cada año, los bomberos realizan casi 4,5 millones de intervenciones en territorio francés. En 2015 se atendieron a 3,5 millones de víctimas. Entre ellos, a menudo, niños, víctimas directas, indirectas o testigos de escenas difíciles e impactantes. Para los bomberos, cuidar a un niño, físicamente herido o no, llorando, agitado, postrado, ansioso ... es una de las intervenciones más difíciles de llevar a cabo.
Acercarse a un menor no es fácil ya que su nivel de comprensión de la situación, su posible dolor, su ansiedad, sus dificultades para expresarse pueden complicar la realización de un balance o incluso gestos de primeros auxilios para el bombero. Para contrarrestar la ansiedad y la atención dolorosa, muchos departamentos de hospitales pediátricos ahora usan mediadores como muñecas o peluches.
Esta es la parte que tomó la FNSPF para facilitar la actividad operativa de los bomberos. Dotar cada ambulancia con un peluche, llamado Pompy®, una herramienta de comunicación real para crear y facilitar el vínculo con los niños que viven una situación difícil. Durante la intervención, Pompy® podría ser utilizado como un peluche, identificando apoyo, objeto de distracción, mediador de información ... En este contexto, la AEPSP recibió el encargo de desarrollar un argumento científico destinado a establecer las ventajas de este medio y el interés de su uso para los bomberos, pero también para los niños y sus padres.
El objetivo aquí es presentarle, en líneas generales, la operación Pompy®, y más específicamente el equipo educativo creado que contiene en particular el argumento científico, así como un cuestionario específico destinado a proporcionar información sobre las condiciones de uso del peluche. Encargados : Stéphanie DELBAERE: Psicóloga clínica, miembro de la junta directiva de la AEPSP. Marie SPRATLEY: Gerente de Operaciones Pompy®.